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Cargando...Hace no muchos años tener un equipo de música de alta fidelidad era sinónimo de distinción. Incluso la estética Hi-Fi, con sus ‘amplis’, platos, pletinas y demás aparatos conformando una torre escoltada por grandes bafles resultaba imponente y reforzaba ese marchamo de calidad y de nivel acústico.
Como es obvio y perceptible, la evolución tecnológica, más bien revolución, ha supuesto un cambio radical en los formatos de audio.
Lo que no ha cambiado es que los dispositivos de alta fidelidad siguen siendo, en general, los que ofrecen un sonido más fidedigno y siguen teniendo su público.
De entre los amplificadores Hi-Fi aquí seleccionados hemos situado en cabeza el modelo AMU-120BT de la marca Aiwa por su amplia conectividad, incluido Bluetooh, potencia adecuada para el ámbito doméstico y precio asequible dentro de esta gama de dispositivos electrónicos.
Como referencia cronológica, el término Hi-Fi, como cebo publicitario para denotar la calidad de los equipos de música, se comenzó a usar en la década de los 50.
Sin embargo, fue en los 70 cuando se mejoró notablemente y adquirió ese tinte aristocrático en el mundo del audio.
¿Qué es la alta fidelidad?
En síntesis, el sonido de alta fidelidad (conocido popularmente como Hi-Fi por las iniciales de su traducción inglesa, High Fidelity) se genera cuando los equipos de audio buscan una distorsión mínima del sonido original.
¿Qué es Hi-Fi y qué no lo es?
Hay que dejar claro que no existe una normativa internacional que determine qué es audio de alta fidelidad y qué no es considerado como tal.
Sentado este precedente, hay que recordar que en 1973 el Instituto Alemán de Normas publicó la especificación para el audio en alta fidelidad DIN 45500.
En ella se incluían variables como la frecuencia, los ruidos, la distorsión y otras deficiencias, si bien no se ha alcanzado un consenso entre lo que es objetivamente Hi-Fi audio.
Para qué sirve el amplificador
Primero, definamos el amplificador como un dispositivo cuya función es aumentar la potencia (tensión e intensidad) de la señal de audio, haciéndolo con la menor distorsión posible para ofrecer una señal de salida con calidad de alta fidelidad.
Por lo general, este dispositivo no es el encargado de reproducir el audio. Es decir, su función es hacer de intermediario entre el reproductor y los altavoces.
En este cometido general hay excepciones ya que también es posible encontrar reproductores con amplificador integrado que permiten la lectura de CD y otros soportes.
No obstante, los amplificadores de mayor calidad son aquellos que funcionan de manera independiente al reproductor.
Nuestra selección de amplificadores Hi-Fi
Completo y asequible
Ocupa la primera plaza un amplificador muy recomendable para uso doméstico por un precio asequible en una gama con una amplia horquilla con desembolsos que pueden llegar a ser muy elevados.
Con una potencia media dentro de los amplificadores básicos, con 60 vatios por canal, y una amplia conectividad que incluye Bluetooh.
Es decir, se beneficia de las ventajas que esta opción inalámbrica conlleva como, por ejemplo, ordenar la reproducción musical desde el smartphone.
Además, cuenta con entradas de audio analógico, USB para pen drive, ranura para tarjeta SD para la reproducción de MP3 y también para, obviamente, altavoces y micrófono.
En cuanto al frontal incorpora un pequeño visor con iluminación LED para proporcionar información que se va desplazando por la pantalla.
El control analógico (también lleva mando a distancia) ajusta el volumen, las frecuencias agudas y graves y el balance.
Sonido limpio
Pasamos a una alternativa de gama media sensiblemente más cara que la anterior, aunque de la misma potencia (2x60W) que proporciona, entre otras características, un sonido limpio y de mucha calidad.
Lleva el conversor digital integrado de alta resolución (un plus a tener muy en cuenta) que permite trasladar esta fidelidad de sonido a archivos siempre que estos sean de alta resolución.
La conectividad, amplia, adolece, sin embargo, de la ausencia de puerto USB (bien es cierto que en estos dispositivos no es tan imperativa como en los terminales informáticos). En todo caso, lleva cinco entradas analógicas, dos ópticas y una coaxial.
Como aspecto específico a destacar, los graves resultan muy profundos gracias a la salida del subwoofer. Se conoce así al altavoz de frecuencias graves, es decir, las más bajas del espectro audible.
Clásico renovado
Nos centramos en un modelo también de gama media de una de las marcas más reconocidas en la gama de dispositivos de audio de alta fidelidad.
Diseño clásico de ampli Hi-Fi con pocos controles y suficientes conexiones para ser intermediario de un sonido fidedigno y lleno de matices.
El clasicismo es compatible con los nuevos tiempos ya que lleva tecnología inalámbrica con Bluetooth integrado para transmitir de manera sencilla canciones en streaming desde dispositivos compatibles.
Por supuesto, incluye suficientes conexiones analógicas con cuatro salidas de línea para transportar la señal de audio, una tape para grabar y otra para radio.
Gama alta
Todavía en el ámbito doméstico (los amplis profesionales son otra dimensión tanto en potencia como en precio), un modelo de gama alta y muy sobrio de diseño con frontal casi liso que requerirá ya un importante desembolso económico.
Por potencia está en la media con sus 60 vatios por canal, pero ofrece, y es lo importante en este tipo de dispositivos, un amplio catálogo de matices que conforman un sonido fidedigno y de calidad.
Una calidad que se extrapola a la opción Bluetooth que viene integrada. En cuanto a las conexiones analógicas viene con cuatro conectores RCA.
Este conector, también llamado conector Cinch, es un tipo de conector eléctrico utilizado para transportar señales de audio y video (su nombre deriva de la empresa Radio Corporation of America, que lo introdujo en la década de 1930).
Qué ventajas tienen los amplificadores Hi-Fi
Destacamos las siguientes.
- Mejoran la calidad del sonido
- Gran variedad de conexiones
- Compatibilidad con wi fi y Bluetooh
- Amplio catálogo de modelos
Qué tipos de amplificadores Hi-Fi hay
En este apartado distinguimos los siguientes:
- Integrado: Incluye todas las funciones en mismo aparato:
- Conexiones de entrada
- Selector para elegir qué se quiere escuchar
- Control de volumen (y de tonos en algunos modelos)
- Balance de canales
- Salida para auriculares
- Digitales: Dentro de los integrados también los hay digitales. Se pueden conectar fuentes de audio digital sin necesidad de tener el convertidor digital analógico (DAC) por separado. Solo se necesita la conexión de los altavoces.
- De válvulas: Usan tubos de vacío en lugar de transistores para amplificar la señal eléctrica. El sonido se genera mediante el control del movimiento de los electrones en un espacio vacío a muy baja presión o en presencia de gases especialmente seleccionados. Un modelo vintage que tiene su público ya que sus defensores argumentan que ofrecen un sonido más cálido y agradable. También hay que decir que tienen menos potencia, consumen más y se calientan.
- Híbrido: Llevan válvulas en la etapa de previo mientras que la salida es a transistores. No son, ni mucho menos, los más extendidos.
- De auriculares: De menor potencia que uno con altavoces. Básicamente, la que necesita para elevar la señal de audio de bajo voltaje de un dispositivo fuente (reproductor digital, DAC o PC) al nivel que exigen los auriculares.
Qué tener en cuenta de los amplificadores Hi-Fi
- Potencia: Que suene muy alto no quiere decir que la calidad sea mayor, ni le acerca más a la fidelidad del sonido. De hecho, si se fuerza el amplificador envía más potencia de la aconsejable generando la conocida y molesta distorsión. Además, la elección en este apartado tendrá mucho que ver con el espacio en el que vamos a tener el dispositivo. Como referencia, entre 60W resulta más que suficiente para estancias domésticas convencionales.
- Respuesta de frecuencia: La respuesta de frecuencia es el gráfico que detalla la sensibilidad de un dispositivo para reproducir y/o registrar el sonido. Para que estos dispositivos se puedan considerar de calidad deberán cubrir al menos 20Hz y 20kHz, un margen que representa lo que un oído humano puede escuchar con normalidad.
- Conectividad: No todos presentan compatibilidad con equipos de sonido convencionales. Por lo tanto, hay que cerciorarse de los tipos de conexión de entrada y salida de los reproductores.
Última actualización el 2024-04-20 at 11:20 / Enlaces de afiliados / Imágenes de la API para Afiliados