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Irene Díaz

Artículo actualizado el viernes 23 de septiembre de 2022

Es oficial. Hoy, 23 de septiembre, es el Equinoccio de Otoño. Lo que quiere decir que ya toca poner patas arriba el armario para hacer el clásico cambio de ropa de temporada.

¡Fuera los pantalones cortos y los bañadores! Ha llegado el momento dela ropa de entretiempo.

Trenchs, cazadoras vaqueras, sobrecamisas… entre otros imprescindibles que hacen falta en nuestros armarios.

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Pronto tocará sacar a relucir el abrigo, pero mientras, aquí va la mejor selección de moda para esta época del año.

Porque llevamos varias semanas esperando a que el calor se vaya y deje paso al descenso de las temperaturas. Una realidad que cada vez está más cerca, y sobre todo teniendo en cuenta que ya hemos vivido los primeros días de lluvia.

Trucos para hacer el cambio de armario con eficiencia

La primera fase: tomar decisiones

Hacer el cambio de armario no es fácil. Lo parece, pero no lo es.

Porque hacer el cambio de armario consiste en, en primer lugar, tomar decisiones. Y es que después de guardar la ropa de verano, toca enfrentarse a la de entretiempo. Volver a tenerla en nuestras manos, después de una larga temporada, y decidir qué hacer con ella.

Marie Kondo, referente sin discusión en esta materia, en su método (el método KonMari) lo explica de una manera muy sencilla. Ella lo llama “la chispa de la alegría”. Y dicha chispa consiste en que, si al coger una prenda sientes una punzada similar a la que sentirías cogiendo un perrito, te la tienes que quedar.

Si no sientes esa punzada, sin embargo, es momento de dejarla marchar. No sin antes haberle dado a la prenda las gracias por los servicios prestados, y siempre de manera respetuosa.

Una vez hemos sido agradecidos, es el momento de colocarla en la pila de tirar o en la de donar.

Finalizado el trabajo, pasamos a la segunda fase.

La segunda fase: revisar lo que ha sobrevivido y detectar carencias

Una vez hemos desechado (respetuosamente) todo aquello que ya no nos sirve, toca revisar lo que sí nos sirve.

Porque entender lo que tenemos va a ser la única manera de detectar las verdaderas carencias de nuestro armario.

Por ejemplo, si ya tenemos una cazadora vaquera… ¿Para qué queremos otra? ¿No será mejor hacerse con una sobrecamisa para seguir aprovechando las camisetas de manga corta? Porque siguen haciendo falta… Sobre todo en esos días en los que tan pronto hace frío como calor.

La tercera fase: apuntar y comprar lo que nos falta

Una vez tenemos en la cabeza nuestra lista de necesidades, toca materializarla (y comprar lo que nos falta). Tan sencillo como valerse de un lápiz y papel.

Dicho esto, y para hacerte esta tarea más sencilla, en CompraMejor hemos elaborado una lista de imprescindibles otoñales.

¡Revisa tu lista de carencias y echa un ojo a nuestras propuestas!