Muy pocas herramientas, por no decir ninguna, se acercan a la longevidad y tienen el peso histórico y simbólico que tiene el hacha. Por eso hemos elaborado esta selección de las mejores hachas para cortar leña al estilo tradicional.
Son muchas las teorías y descubrimientos que han intentado fechar su aparición, pero, en cualquier caso, ya era de uso común en la Prehistoria.
En tantos miles de años, como es lógico, la evolución ha sido abismal tanto en materiales y formas como en usos ya que, por ejemplo, en la Antigüedad fue un arma de guerra de gran importancia.
De regreso a la actualidad, de las aquí seleccionadas hemos situado en cabeza un modelo moderno de Gardena por su consistencia de material, seguridad en la ensamblaje entre la hoja y el mango y ser muy útil para cortar leña y cubrir las necesidades domésticas.
Un hacha es una herramienta con filo metálico que está fijado de manera segura a un mango, antes generalmente de madera y ahora de distintos materiales, y que tiene como función cortar mediante sucesivos golpes en el objeto.
En su inmensa mayoría troncos de árboles o trozos de madera de notable tamaño, aunque su versatilidad incluso alcanza al ámbito de la decoración.
Entre las ventajas de las hachas indicamos las siguientes:
Sobre las desventajas de las hachas:
En esta ocasión la tradición no se lleva el liderato ya que hemos optado por un hacha de concepto moderno que resulta altamente eficaz por un precio que está por encima de la media de esta gama, pero que se justifica en sus prestaciones.
Antes de detallar sus características, adelantemos que se trata de una herramienta muy orientada al uso doméstico para cubrir las necesidades de leña si se disfruta de chimenea en casa.
Por su tamaño no está tampoco ideada para afrontar grandes trozos de madera, pero si ramas y troncos de diámetros habituales en este tipo de suministro para avivar el fuego.
También resulta muy práctica para fijarla al cinturón y salir al campo con ella. Se puede llevar sin peligro gracias al protector del filo.
Una de sus principales bazas es, sin duda, el sistema de engarce entre el mango, fabricado en plástico reforzado con fibra de vidrio y muy ergonómico, y el cabezal que ofrece todas las garantías para no soltarse, uno de los principales problemas que afrontan otros modelos más clásicos.
El diseño de la hoja de acero reforzado ofrece la posibilidad de usar la parte opuesta al filo como martillo. No es de las más baratas en la gama de hachas de mano, pero sí ofrece prestaciones que justifican su precio.
Un modelo adscrito al modelo tradicional que se potencia todavía más por su mango diseñado como en madera vieja, pero sin olvidar una leve curvatura que refuerza la firmeza de su agarre.
Un hacha económico de precio que también se orienta al uso doméstico sin que rinda en usos extremos, con maderas de gran envergadura, pero sí en troncos y ramajes de pequeño y mediano diámetro.
Para su precio, la hoja de acero templado ofrece una óptima resistencia. Su afilado puede ser algo trabajoso, pero eso viene a indicar que el metal usado es de garantías para su cometido.
En cuando a medidas y peso, estamos ante una herramienta de unos 35,5 cm de largo, una medida propia de los hachas de mano, y un peso de unos 800 gramos.
En resumen, práctica para la casa, buen agarre, fiabilidad de materiales y hasta potente estética con ese aire simple y vintage.
Un hacha ya muy distinta principalmente por una longitud que la sitúa en el tipo de tala. Algo más de 60 cm de largo para una herramienta que resulta económica para sus materiales de fabricación.
Así, la hoja está hecha con acero al carbono y el largo mango con fibra de vidrio, un material muy resistente a la humedad y a los cambios de temperatura.
En conjunto, el peso de este modelo está en 1,6 kilos, de los cuales aproximadamente un kilo corresponde al cabezal.
Un hacha de partición que, además de los materiales, apuesta por una óptima ergonomía para agarrar con seguridad el hacha. A ello ayuda un revestimiento antideslizante.
De vuelta al hacha de mano con esta alternativa que, entre las de su gama, destaca por un precio sensiblemente superior.
Se encuadra en las conocidas como hachas de rajar que reducen la fricción y facilitan de este modo su entrada en la madera.
Un diseño muy integrado entre cabezal y mango que da apariencia, y así se cumple, de una total seguridad en la unión entre hoja y mango.
Este último mezcla materiales ya que, salvo el revestimiento de la parte superior, es de madera.
Una alternativa específica para cerrar con esta hacha compacto pensado para sacar de algún apuro en el cámping o en excursiones campestres.
Pequeña, barata y limitada en su utilidad a pequeñas ramas o cortes diversos que puedan surgir.
Con todo, no se trata de un hacha de juguete ya que su cabezal está fabricado en acero con alto contenido de carbono y, por tanto, resulta consistente dentro siempre de los márgenes lógicos.
La hoja es, obviamente, metálica con el hierro y el acero como materiales más recurrentes para su fabricación.
En el caso del mango, como ya hemos adelantado al comienzo, la madera, con su robustez y ligereza, era la opción más tradicional.
Sin embargo, como ejemplo de esa evolución, en la actualidad también podemos encontrar modelos con el mango de acero (muy resistente, pero demasiado pesado) o de sólidos plásticos y mezclas con fibra de vidrio.
Además de por el tipo de material de su mango, hay diversas opciones. Señalamos las principales:
De mango corto y orientada al corte de árboles pequeños.
Más grande y diseñado su mango para hacer un movimiento con la mano (swing) más largo y potente. Se usan maderas muy resistentes para el mango como puede ser el nogal.
Por tamaño de mango es similar a la anterior, pero cambia el cabezal metálico.
En este caso es menos agresivo de diseño, con una superficie cóncava más grande, en forma de cuña, para penetrar mejor en la madera y partirla de manera más sencilla.
También las hay de doble punta con un extremo afilado para cortar madera y otro distinto para dividir la madera en trozos pequeños.
Además, hay otras que se determinan por su uso. Destacamos las siguientes:
La usada habitualmente por los bomberos. Tiene la hoja de corte por un lado y un pico en el otro para romper espacios complicados.
Recapitulamos y resumimos en solo dos los criterios fundamentales:
Una vez detalladas muchos de los tipos de hachas que hay en el mercado resulta superfluo señalar el uso que se le va a dar como factor fundamental.
Es absurdo plantearse cortar una rama de árbol con un hacha de cocina, por poner un ejemplo extremo, pero elocuente.
Ya hemos dedicado un apartado concreto. Por resumir, el hierro o acero para un cabezal bien afilado y un mango de madera de calidad componen el hacha-tipo más convencional.
Aportamos algunas pautas para quienes quieran afilar la herramienta por sus propios medios:
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Última actualización el 2024-04-27 at 12:20 / Enlaces de afiliados / Imágenes de la API para Afiliados
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