Perder las llaves de casa es uno de los mayores sobresaltos domésticos a los que nos enfrentamos. En la actualidad, gracias a los inabarcables tentáculos de la tecnología, hay recursos muy asequibles para evitar esta eventualidad.
Entre ellos los llaveros inteligentes o localizadores de llaves que no se quedan solo en eso sino que, según los modelos, ofrecen más prestaciones.
De entre los aquí elegidos, situamos en cabeza uno de radiofrecuencia de la marca JTD por su sencillo uso, buen radio de cobertura y económico precio.
Un pequeño dispositivo tecnológico que, a través de Bluetooh o GPS, localiza de manera inmediata el llavero que lo incorpore mediante señales que llegan a tu smartphone o terminal que corresponda.
Son relativamente recientes, pero su utilidad y un desembolso aceptable hace que cada vez se expandan más.
Están determinados por el sistema tecnológico que usan:
En esta ocasión no ha sido la sofisticación tecnológica la que más ha pesado en la balanza a la hora decantarnos por el modelo líder.
De hecho, todo lo contrario ya que se trata de un sencillo dispositivo que funciona mediante radiofrecuencia y que resulta muy útil además de muy económico.
Se trata de un localizador para cuatro juegos de llaves, cada uno identificado con un color diferente.
Sobre la base está el transmisor con cuatro iconos de los mismos colores que los receptores. Si se lleva, por ejemplo, el rojo y no se encuentran las llaves basta con pulsar la llave de ese color y el pitido, bastante intenso, y los destellos guiarán hasta su localización.
Es un localizador ideal para los despistados que van a salir de casa y no se acuerdan donde las han dejado ya que su alcance de 30 metros resulta suficiente para una casa convencional.
También se puede intentar, si se han perdido por el camino, rastrear la ruta inversa con el transmisor para ir pulsando a ver si hay suerte.
Funciona con pilas y el inconveniente es que hay que estar muy pendiente de que tenga suministro ya que, de no ser así, pierde toda su funcionalidad. Acaso se eche de menos un chivato avisador de la cercanía de la descarga.
Un localizador de apenas el tamaño de una chapa que, gracias a la tecnología Bluetooh, se convierte en un potente dispositivo multifuncional con una cobertura de búsqueda de hasta 50 metros.
En este tipo de modelo ya se requiere, no como en los de radiofrecuencia, el complemento de un terminal y el uso de una aplicación para saber dónde se encuentra el llavero perdido.
Su tamaño y forma lo hace extremadamente versátil para otro tipo de cuestiones, por ejemplo para colgarlo en el collar de la mascota ya que viene a ser del mismo tamaño de las chapas plásticas de las vacunas.
Su compatibilidad tecnológica es muy alta y su precio bastante bajo. En el primer caso, se puede usar con Tuya App (empresa dedicada al control de dispositivos inteligentes) y también su control de voz es compatible con Siri, Alexa o Google Assistant.
Volvemos a la gama básica por funcionamiento ya que por precio están en una media bastante similar. En esta opción se facilitan dos receptores con un pequeño transmisor y el modo de operar es idéntico.
Es decir, en caso de pérdida se pulsa el color correspondiente al llavero extraviado y si esté en el radio de cobertura, en este caso en torno a los 40 metros, una señal acústica y lumínica a la vez avisará de su localización.
La autonomía de uso es óptima gracias a que lleva pilas de litio que son las más recomendadas para alargar la eficacia de estos localizadores y que además se incluyen en el producto.
La ventaja más destacada de este tipo de localizadores es que no es necesario para que esté operativo ningún terminal añadido ni tampoco aplicación.
Otra alternativa en forma de chapa, en este caso más llamativa por sus vivos colores, que se puede enganchar a cualquier sitio y que tiene la ventaja en exterior de que es resistente al agua.
Por lo demás, precisa de la tecnología Bluetooh, cuenta con aplicación propia y es compatible tanto con iOS como con Android.
Una de las bazas más atractivas de este modelo es que su pila puede alcanzar los dos años de vida y, por si fuera poco, se notificará cuando esté a punto de agotarse para no perder la operatividad del localizador.
Un poco más cara, pero en un margen de precios muy económicos y que no resultará un hándicap si se quiere un dispositivo ideado para exterior y con muchas opciones de uso (por ejemplo, colgarlo en una mochila).
Una última opción de los que consideramos son los mejores localizadores de llaves que sí que resulta sensiblemente más cara, dentro del segmento asequible, si bien se trata de un pack con cuatro receptores y un diseño más llamativo a modo de llavero con su pequeña cadena y cierre.
Como el anterior, usa tecnología Bluetooh y se controla a través del móvil después de configurar la aplicación Nut. Es compatible con todos los modelos.
La aplicación incorpora un mapa de ubicación en tiempo real. Registra en el terminal la última ubicación. La pila dura en torno a diez meses.
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