Presumir de jardín tiene un precio en tiempo y también en recursos. Algunos de ellos, por sus características y prestaciones, también pueden ser un práctico aliado si se cuenta con huerto propio.
Nos referimos a la motoazada. De las aquí elegidas hemos situado en cabeza una eléctrica de la marca Einhell orientada principalmente a huertos domésticos por su eficacia en este terreno, su manejabilidad y asequible precio.
Esta herramienta, de amplio catálogo en función de las necesidades, se adapta a muy distintos terrenos aumentando así su versatilidad.
Es una máquina de tipo agrícola, pero con muy amplias funciones en distintos terrenos como jardines huertos o parterres.
Está ideada para sembrar, cavar, abonar, quitar malas hierbas o airear la tierra. Todas estas labores las acomete gracias a la incorporación de unas cuchillas que permiten trabajar la tierra a cierta profundidad (como referencia a unos 30 cm).
Establecemos la más clara en función de su suministro energético:
Como hemos ya referido, dentro de las muchas opciones, nos hemos decantado por una básica y doméstica orientada al cuidado y mantenimiento de huertos y jardines particulares.
En sintonía con las características de estas máquinas más pequeñas se trata de un modelo de suministro eléctrico. Dentro de esta gama es además especialmente ligera (algo menos de 7,5 kilos) y, en consecuencia, muy manejable.
Muy práctica para terrenos no demasiado grandes ni duros. Será una herramienta de gran utilidad, por ejemplo, a la hora de labrar un pequeño huerto.
Hay que tener especial cuidado en no usarlo en superficies que tengan demasiadas piedras ya que se pueden quedar en las cuchillas y averiarla. Si se acometen trabajos en hierbas altas es aconsejable cortarlas antes un poco a mano.
Con potencia suficiente para estas labores con sus cuatro cuchillas incorporadas, 20 cm de profundidad de trabajo y 30 cm de ancho.
Una máquina con una excelente relación calidad-precio siempre que se use dentro de sus limitaciones de dimensiones y estado del suelo.
Sin salir de las eléctricas, una alternativa de mayor peso en todos los sentidos. También en precio más elevado, pero asequible en esta gama que suele ser la más económica al lado de las motoazadas de combustible.
Cuenta con mayores prestaciones respecto al anterior modelo ya que, por ejemplo, tiene la posibilidad de trabajar con dos anchos de trabajo distintos.
En concreto, se puede trabajar con seis cuchillas que dan una medida de 45 cm o, en función de la labor, con solo cuatro y una anchura de 32 cm. En cuanto al tope de profundidad en el terreno también es de 20 cm.
Bastante potente, con sus 1500W y hasta 400 rpm, para acometer con garantías trabajos en huertos de reducida dimensión, invernaderos o jardines para, por ejemplo, quitar las malas hierbas.
Pese a que el tamaño ya resulta considerable, su sistema de plegado posibilita que se pueda guardar sin necesidad de mucho espacio.
Nada que ver con las anteriores ni en suministro energético, tamaño, peso o precio. En estos tres últimos aspectos tira al alza de manera considerable.
Lógico en la gama de motoazadas de gasolina a la que pertenece. En concreto, incorpora un motor de cuatro tiempos de 208 cc con una potencia real de 7,5 CV.
Entre sus prestaciones cuenta con la posibilidad de variar de manera amplia tanto el ancho de trabajo como la profundidad.
En el primer caso la horquilla va de 50 a 85 cm y en el segundo cava de 17 a 35 cm. Estas variaciones le dotan de una gran versatilidad.
Como se intuye tras esta sinopsis de características se trata de un motocultor adecuado ya para terrenos más grandes y sin depender de su estado ya que su potencia ayuda a superar los obstáculos.
Al igual que en el caso de las eléctricas, incluso más, las motoazadas a batería están destinadas en general a afrontar labores de pequeña envergadura.
Como ya hemos señalado, la ventaja de esta opción es que no se precisa tener cerca una toma de corriente y el inconveniente que su autonomía de uso es limitada y precisa cargarse cuando se vacía.
En este modelo concreto, la autonomía está sobre la media hora y viene provista de una batería de litio de 18V con su cargador incluido.
Sin duda, una de sus cualidades más destacadas es que resulta más que ligera y manejable ya que no llega a los cuatro kilos.
No resulta barata si se compara con algunas eléctricas de igual o mayor potencia, aunque hay modelos a batería que multiplican por mucho su precio.
De regreso al combustible para cerrar con una motoazada que ya puede servir incluso para el ámbito profesional por su potencia, prestaciones y también su muy elevado precio respecto a las anteriores.
A cambio, un ancho de trabajo que supera el metro de longitud, un cómodo manillar para manejarla y dos marchas hacia delante y marcha atrás.
Las cuchillas de sable permiten trabajar sobre todo tipo de terreno y las ruedas están adaptadas para pasar sin problemas por terrenos abruptos.
Aportamos algunas pautas sobre cómo usarla:
El mantenimiento de estas máquinas es fundamental y dependerá del tipo de motoazada que sea más o menos complejo. En el caso de las de combustible lo será mucho mes que en las de batería o eléctricas. Destacamos algunos consejos:
Última actualización el 2024-05-17 at 02:20 / Enlaces de afiliados / Imágenes de la API para Afiliados
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