La mejor manera de reducir los residuos orgánicos es crear nuestro propio compost natural.
En los últimos años en nuestras ciudades y pueblos se han multiplicado los contenedores marrones, los orgánicos, donde se desechan los residuos biodegradables.
Sin embargo, en aquellas casas con jardín o huerto es aconsejable disponer de un compostador: un depósito donde se transforman los residuos en abono.
El compost es un fertilizante casero, natural y libre de sustancias químicas.
Rastreando el mercado, el modelo de la marca Deuba aúna las mejores valoraciones por parte de especialistas y usuarios. Por este motivo, ocupa el primer lugar de esta comparativa.
Fabricado con un resistente plástico, el material no se endurece por los cambios bruscos de temperatura ni su color se deteriora tras la exposición directa al sol.
A su durabilidad y mantenimiento, cabe añadir la posibilidad de escoger este compostador en varias opciones de capacidad.
En primer lugar, los contenedores para compost posibilitan que el material orgánico se descomponga de manera natural.
Así, se reduce la emisión de gases de efecto invernadero como el metano y el dióxido de carbono.
Asimismo, el compostaje proporciona al suelo un complemento saludable y aporta nutrientes para que las plantas crezcan sanas.
Los especialistas destacan que actúa como bactericida y fungicida, disminuyendo muchas plagas y, por lo tanto, mejorando la salud del jardín o del huerto.
Por último, también favorece al ahorro mediante la producción de nuestro propio abono natural. Una razón de peso para decidirse a comprar un compostador.
La lista es extensa, pero ten en cuenta que en un compostador se puede arrojar todo tipo de restos vegetales.
Desde pieles y huesos de frutas y verduras, hasta hojas, restos de césped, estiércol, paja, cáscaras de frutos secos y de huevo, serrín, plumas, pelos…
Lo ideal sería echar todos los restos al mismo tiempo para que la descomposición sea homogénea.
Pero, por lo general, se va rellenando poco a poco, por lo que hay que esperar más tiempo para conseguir un excelente abono natural.
Para que la transformación sea lo más rápida posible conviene triturar los restos lo máximo posible. El abono estará listo cuando su apariencia sea terrosa.
El compost fresco se obtiene a los dos/tres meses de descomposición.
Puede que todos los restos no se hayan descompuesto, pero está listo para reducir la aparición de maleza y proteger el suelo ante heladas o altas temperaturas.
A los 5/6 meses ya no se observa ningún desecho y se obtiene abono natural maduro que huele y tiene el aspecto de tierra mojada.
En este momento el compost es un excelente abono para todo tipo de terrenos y semilleros.
Los compostadores son depósitos sencillos. Pero antes de comprar, echa un vistazo a las siguientes características:
El precio de un compostador no es elevado en comparación con el ahorro que supone el no tener que comprar abono.
Además, al producir nuestro propio compost orgánico y natural, reciclamos, reducimos la cantidad de residuos y nos aseguramos de que la tierra está libre de productos químicos.
A continuación, verás contenedores para compostaje asequibles desde 40 euros y otros modelos con mayor capacidad que alcanzan los 100 euros.
Miles de personas, cansadas de utilizar productos químicos para producir abono, han decidido crear su propio humus ecológico y natural con el compostador de Deuba.
Fabricado con plástico duradero y resistente, está diseñado en color oscuro con un objetivo: acelerar la descomposición al atraer el calor y subir la temperatura.
El montaje es sencillo, a través de un sistema de clips que ensambla las piezas sin necesidad de manejar ninguna herramienta extra.
No obstante, y como punto de mejora, algunos compradores han echado de menos unas instrucciones gráficas.
En cuanto al uso también es realmente sencillo y no requiere de ningún esfuerzo.
Se rellena por la parte superior y, una vez descompuestos los residuos orgánicos, obtendremos abono natural que se extrae a través de una portezuela situada en la parte inferior.
La marca ofrece cuatro opciones de capacidad: 380, 800, 1.200 y 1.600 litros.
Como segunda opción se ha escogido el compostador DF Omer, guiados por la opinión de los expertos y los usuarios que lo han adquirido.
Se trata de un contenedor, con capacidad de 420 litros, fabricado con ligero plástico reciclado libre de elementos químicos nocivos para la salud como el Bisfenol A.
Al igual que el resto de modelos está diseñado en color negro para mantener el calor y regular la humedad. De este modo se disminuye el tiempo de compostaje.
Su ensamblaje también resulta rápido gracias al intuitivo manual de instrucciones que incorpora.
Cuando el humus esté listo, basta con abrir la puerta corredera inferior y abonar nuestro huerto o jardín.
Si la cantidad de compost obtenida no es suficiente, se puede acoplar una extensión que encaja en la parte inferior del contenedor.
Esta aporta una capacidad extra de 220 litros y un volumen total de 640.
Vounot ha fabricado un contenedor con material plástico reciclado y resistente y de una capacidad total de 300 litros.
Este compostador es ideal para espacios reducidos y jardines de pocos metros cuadrados.
La característica más destacada es su montaje, sin necesidad de utilizar herramientas. Siguiendo unos simples pasos armarás el contenedor en pocos minutos.
Se rellena levantando la tapa superior que queda a una altura de 80 centímetros de altura.
Una vez que los desechos orgánicos se han transformado en compost podremos abonar nuestro huerto o jardín abriendo la puerta inferior situada en la parte frontal.
El humus se forma de manera eficaz y rápida gracias al alto desarrollo de calor que se genera en el interior del contenedor y a la circulación del aire que penetra por las ranuras.
La marca oferta la opción de adquirir dos contenedores con un precio en la segunda unidad de casi el 50 % de descuento.
Un compostador no es el elemento ornamental ideal ya que, normalmente, se asemeja a un contenedor de basura que desluce cualquier jardín florido.
Keter, que ha tenido en cuenta este aspecto, ha diseñado un distinguido compostador de imitación madera oscura.
Este se adapta tanto a un estilo rústico como a uno más urbano, convirtiéndose en un complemento decorativo para el jardín.
Está fabricado con polipropileno inyectado resistente al sol, la lluvia y la nieve. El plástico no se verá afectado ni perderá color.
En cuanto a su capacidad, el compostador DECO de Keter puede almacenar hasta 340 litros de humus. Es decir, para pequeños huertos y jardines, tal como señalan los especialistas.
Para recoger el abono natural obtenido tras la descomposición se retira la trampilla delantera.
Quienes quieren iniciarse en el proceso el compostaje para obtener abono natural, pero sin necesidad de realizar una gran inversión, deberían echar un vistazo al cubo de compostaje de Compost Converter.
Se trata de un compostador, muy parecido a sus competidores en cuanto a diseño, con capacidad para 300 litros de material orgánico.
El montaje se asemeja al de los otros modelos y cuenta con tapa superior y puerta extraíble para recoger el compost.
Sin embargo, se debe tener en cuenta que no cuenta con una tapa inferior. Por eso, los especialistas desaconsejan colocarlo en una terraza.
Última actualización el 2024-05-08 at 21:20 / Enlaces de afiliados / Imágenes de la API para Afiliados
Tabla de contenidos
En una era marcada por los avances tecnológicos, se patentan nuevos productos que jamás hubiéramos…
Ir a la compra andando siempre parece una buena idea, sobre todo cuando el supermercado…
Los humidificadores pueden jugar un papel fundamental, aunque no lo creamos, en nuestro hogar: mantienen…
Con la llegada del sol y los días más largos, es momento de equiparse con…
Si la manguera es un accesorio común y de gran utilidad, con la llegada del…
Si hay algo que triunfa en la lista de ventas de libros son las historias…